Limbo, el asador ‘casual’ de Grupo La Musa en Malasaña

Con el pollo a la brasa como protagonista de una carta ultrasencilla, este formato de asador moderno, ‘casualizado’ y asequible abre en Bastardo Hostel, en cuyo lobby convive con un concepto de cervecería también ideado y gestionado por Limbo.

Cumple con dos conceptos tan clásicos como, al parecer, convertidos en ‘tendencia 2018’: la brasa-asadory el pollo asado. Mientras las tesis en torno a la parrilla son diversas (como demostró Haragi, cita internacional de parrilleros, celebrada a finales de abril de 2018 en Basque Culinary Center y Tolosa), los formatos de negocio en torno a la brasa, la parrilla y el asado parecen avanzar, bien con nuevos locales (como Carbón Negro o Smoking Club), bien como capítulos ‘ad hoc’ en cartas de aperturas más o menos recientes. Y, a la vez, la vuelta del popular ‘pollo asado’ parece ya realidad. Lo corroboran formatos casi monográficos como Apluma, bar de ‘pollos a l’ast’ abierto por el ex Bulli Eugeni de Diego en Barcelona; y, ahora, Limbo, en Madrid. Tanto Apluma como Limbo optan por la máxima ‘casualización’que parece exigir una receta tan casera y democrática como es el pollo asado.

Nuevo concepto de Grupo La Musa

Con todo, esta receta no es una ‘exclusiva’ en Limbo, que, sin ser un formato monotemático, sí elige la denominación ‘asador’ para presentar un local abierto en Bastardo Hostel de Malasaña, moderno hotel en el que arranca este proyecto de Grupo La Musa. Así, la firma hostelera madrileña, que arrancó en 1996 con la primera sede de La Musaen la calle Manuela Malasaña (cuenta con otra en La Latina), suma un concepto nuevo a su colección de locales abiertos en Madrid en apenas 22 años (Ojalá y Cafetería HD, aparte de las sedes de La Musa).

Pollo a la brasa, hilo conductor de la carta

Situado en el lobby del hotel (entrando a la derecha), Limbo arrancó el pasado mayo con la idea de convertir “el pollo a la brasa en hilo conductor de su carta”. Para cumplir con este objetivo, cuenta con un horno creado exclusivamente para este local por su equipo de cocina y con el asesoramiento de un experto artesano, similar a un camión cisterna, dividido en 3 secciones: 2 para la cocción de pollo y la tercera para la parrilla a la que se someten otros platos como hamburguesao costilla. “El proceso será como antaño, cuando se cocinaba con madera, hierro y fuego auténtico, un proceso que se ha ido perdiendo y que en Limbo vamos a recuperar con todo el sabor que añoramos”, señalan desde Limbo (por cierto, el nombre viene, por lo visto, de un concurso de baile de la isla de Trinidad).

La carta

El pollo asado al carbón(marinado con especias y despachado entero o en mitades, por 13 y 7 euros, respectivamente) es el protagonista de la ultrasencilla carta de Limbo, basada, en cualquier caso, en un breve listado de platos, firmada por el cocinero argentinoJavier Brichetto. Así, solo hay 4 platos principales: Hamburguesa de ternera a la brasa con queso fundido, tomate, lechuga, chimichurri y pan de pueblo(9 euros); Bocadillo de brisket con tomate asado con salsa criolla (9) y Costilla de cerdo levemente ahumada con salsa BBQ Jack Daniels (14), aparte del pollo a la brasa. Se pueden acompañar de 4 guarniciones: Patata asada de feria, Arroz caribeño con frijoles refritos, Espinacas gratinadas con queso Havarti y Ensalada clásica de lechuga y cebolla morada 8cn precios de 3,50 a 4,50 euros).

La breve carta se completa con 4 entrantes(de 4,50 a 7,50 euros):Crema de calabaza al rescoldo con tomates cherry, Queso provolone a la chapa con pimientos asados, Tomates a la brasa con perejil y aceite de ajo asados o Croquetas caseras de pollo y jamón. De postre (4,50 euros cada postre), otro cuarteto: Cremoso de chocolate blanco, mango y espuma violeta; ‘Lemon pie’ con galleta de mantequilla y merengue quemado, Flan de dulce de leche con espuma de queso y caramelo yel ‘Mug cake’ de chocolate con helado de galleta. Para beber, cervezas, vinos por copas, sangría, tinto de verano y alcoholes ‘artesanos’ para combinados.

Es decir, sencillez al poder. “Creemos que la gastronomía en general sigue esta tendenciade una propuesta breve”, argumenta Brichetto.En Limbo, conceptualizado como un asador moderno, ‘casualizado’ y asequible, se puede comer por un tícket medio de 15 a 20 euros.

Doble formato de Grupo La Musa

Aparte de la zona del restaurante, Limbo cuenta con una cervecería en el bajo de Bastardo Hostel (entrando a la izquierda) con un quiosco, desde el que se despachan bebidas y tablas de picoteo frío.

Con interiorismo de Estudio Triscaideca, con supervisión de Grupo La Musa, Limbo cumple con el ‘look’industrial de Bastardo Hostel. Separados por la pequeña recepción de este hostel, elrestaurantesuma mesas, barra con una isla con tiradores de cerveza y cocina vista con el horno; y la cervecería se estructura en torno a una barra con gradas y un escenario en altura, que acogerá actividades culturales.

DóndeWebPrecioHorario

Limbo. San Mateo, 3. Madrid

De 15 a 22 euros

Abre de lunes a jueves de 13.00 a 1 de la madrugada; los viernes, de 19.00 a 2.00; y, el domingo, de 13.00 a 00.00 horas

Fuente de las fotos: Grupo La Musa.

Acerca del autor



“Economista de formación y periodista de profesión, me encanta escribir y, además, comer. GASTROECONOMY nació el 30 de julio de 2011 como un pequeño proyecto personal, a los 4 meses de decidir convertirme voluntariamente en periodista ‘freelance’. Aquí escribo de lo que ocurre en el sector: cambios, novedades, estrategias, tendencias… Se trata de observar para contarlo de la forma más amena y detallada posible. La hostelería, sea un sencillo bar, una casa de comidas o un espacio de alta cocina, equivale a un relevante sector económico que se puede analizar con el mismo rigor y seriedad que cualquier otra actividad, eliminando la frivolidad que, por desgracia, sobra en los últimos tiempos en la gastronomía. A escribir aprendí y aprendo con la práctica y porque me enseñaron a hacerlo en mi casa y en el diario económico Expansión (www.expansion.com)”.